La licantropía es la creencia o la leyenda de que un humano puede transformarse en un lobo. Es un tema común en el folklore y la cultura common.
A lo largo de la historia, muchas han sido las culturas que han incluido en su folclore la figura del hombre lobo o licántropo, un individuo que según la mitología, se convierte en un humanoide con aspecto de lobo las noches de luna llena.
La figura del hombre lobo ha sido adaptada en numerosas ocasiones en la cultura common, tanto en películas como en sequence de televisión y videojuegos.
La maldición de la licantropía también es considerada por algunos académicos como un castigo divino. La literatura de hombre-lobo muestra muchos ejemplos de Dios o santos supuestamente maldiciendo a aquellos que han provocado su ira con dicha transformación.
Los efectos del consumo del cornezuelo del centeno son alucinaciones, histeria y paranoia, y en ocasiones también podían aparecer convulsiones o incluso llegar a la muerte.
El folclore rumano actualmente tiene múltiples variaciones del tema de la licantropía. El vârcolac es frecuentemente —mas no exclusivamente— visto como un hombre lobo aunque puede también referirse a demonios, vampiros, duendes o fantasmas; el pricolici es más universalmente una forma de lobo, y de muchos como el strigoi se dice que anteriormente eran humanos no muertos, habiendo resucitado desde su tumba para hacer estragos a los vivos.
Estas historias, aunque a menudo envueltas en superstición y miedo, nos ofrecen una ventana al pasado, revelando las creencias, las ansiedades y las formas en que las sociedades lidiaban con lo desconocido.
La táctica del hombre lobo es el ataque por sorpresa, acercándose con cuidado y aprovechando sus afilados colmillos para morder y desgarrar a sus víctimas. Un hombre lobo sólo puede ser herido por armas mágicas o de plata.
No se sabe a ciencia cierta de dónde surge el mito del hombre lobo por lo que han surgido varias teorías acerca de su origen. Una de ellas alude al cornezuelo del centeno, un hongo que se encontraba en los granos de centeno y del que deriva la sustancia LSD.
La licantropía también ha sido relacionada con algunos trastornos mentales, como la esquizofrenia y la paranoia. Estos trastornos pueden causar delirios y alucinaciones, lo que puede llevar a la creencia de que uno se está transformando en un animal.
Existen leyendas en el folclore español sobre oggy1688 una "familia" de licántropos que vivían en el Reino de Castilla a mediados del siglo X. Esta familia de licántropos llamados "Los Zerra" trabajaban para el rey Alfonso III para proteger la ciudad de Toledo de mercenarios. Los Zerra o Sierra eran una familia muy diplomática según la leyenda, caballeros educados todos, sobre todo el padre de la familia Fabio de la Zerra, cosa que es muy poco común entre los licántropos.
El gran problema de los licántropos es que al transformarse en lobo pierden toda su condición humana y se convierten en un peligro para todo el que los rodea, incluyendo a sus seres cercanos
El tanoana es lo divino en el hombre y después de la muerte regresa a su señor, Poewempala boeroe. Esto va en adelante durante el sueño, y todo lo que esto ve lo susurra en el oído del durmiente y luego él sueña. De acuerdo con otro cuento, el tanoana es la sustancia de la cual el hombre vive, piensa y actúa; el tanoana del hombre, plantas y animales es de la misma naturaleza. El tanoana de un hombre puede ser fortalecido por aquellos de otros; cuando el tanoana se va o es destruido el hombre muere. El tanoana parece ser el alma a la cual las hazañas de licántropos son atribuidas.
Los cuentos populares describen a los hombres lobo como criaturas solitarias que se escondían en los bosques durante el día y emergían de noche para buscar presas. Se decía que la luna llena 10ía un poder especial sobre ellos, intensificando su transformación y sus instintos animales.